Fragmentos (1)

1

Quería despertarse siete en punto, salir de la cama a eso de las siete y cuarto, matear hasta las ocho, ocho y diez (como mucho). No supo cómo, pero lo consiguió.


2

Leía los futuros en el diario; tan viscerales y tan húmedos a esa hora del primer pis que, al rato, se encontraba retrocediendo por los hilos de los tiempos hasta afianzarse en imágenes, solamente en imágenes. Pero, peor, sentarse antes, tranquilo, hasta que el mate le empezaba a generar un gesto en el estómago, contra la ventana de la cocina, mirando un pedazo de lugar común: “un cielo hoy ciertamente soleado”. (Una nube tonta. “Futuros eran los de antes”). Y sentado contra el vidrio semimugriento de la cocinita, tenía esa sensación de revoltijo de recuerdos pelados, hasta que el pibe del kiosco de diarios y revistas le tiraba el diario por debajo de la puerta. Entonces aguardaba el instante en que, apurando la última chupada (y ahí era cuando empezaba el día), se iba invariablemente a cagar. (“Chau, nube”).


3

“Para nada raro que el agua de este inodoro se junte con (¡te lleve hasta!) las aguas del río, los océanos”.


4

Hay que ser boludo para ser realista. “Sí, hay que ser realista”. Esa es la mejor manera –la única forma- de desfigurar las fantasías. O sea: de trompear el lisérgico vuelo de mi imaginación chatísima (soy horrible) y reducirlo al mero hecho cotidiano, es decir verdadero, como toda espuria verdad. “Tengo que pagar la luz, el gas e Internet. Tengo que cogerme a Nuria”. Nunca vas a usar el bidet como corresponde. Nunca. Limpiate bien, ¿querés?


5

La casualidad del multiverso. Pavada de mañana, hoy. El diario abierto en la sección clasificados: “Personal. 30-40añs p/Pegar Afiches 5hs de Mañ o Tarde Pago sem Hoy unic 8-13hs.” “Empleado p/Ferretería c.exp.” “Sol. Golosa y Atrevida Siempre x atrás.”

(continuarás...?)